Una calada más por tus recuerdos, o por cómo han llegado hasta aquí. Una calada por todas las veces que has dicho mi nombre en tu mente, por todos y cada uno de los besos que me diste y los que nos quedan por dar. Una por tus principios, otra por mi final. Una por nuestra noche y su ocasión. Otra por todo lo que callé. Y la última, una de esas largas para que me tengas en cuenta, siempre. Las que quieras mientras no haya amanecido que sepas que me encanta fumar, pero prefiero otro vicio.
lunes, 13 de diciembre de 2010
Pasó, ya está. La vida sigue.
No te creas que voy a estar llorando durante todo el tiempo o que voy a quemar todos tus recuerdos. Que vá. Tampoco has sido tan importante. ¿Sabes? Lo podrías haber sido. Pero sin embargo, en lugar de luchar por ocupar un mínimo lugar en mi corazón, luchaste para conseguirme. Y cuando lo hiciste, acabó. Creo que lo nuestro acabó desde ese mismo instante. Desde el momento en el que decidí que quería estar contigo.
Te quise. En realidad, no es así. Pero queda bien decirlo♥.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario